Buenas a todos.
Aunque aún os debo una
cosilla, esta semana vamos a por una entrada clásica, de un clásico.
Más que nada por meterme
poco a poco en faena, que tengo los niveles de maldad muy bajos según
el último análisis de sangre, y hay que recuperarse a poquitos.
Además, en las últimas
quedadas en la tienda hemos hecho, sin proponerlo, un buen repaso por
los juegos de Feld, así que hay que aprovechar que está reciente.
La edición que tengo es
la Ravensburger-Alea en perfecto alemán. Si es que la invasión la
llevan gestando desde hace años
Resumen: Pues
temático, lo que se dice temático, de estos que te pones música
acorde y dejas volar la imaginación, pues no es que sea mucho.
Es
tan abstracto que ni se han molestado en currarse una intro decente.
Te sueltan que sois unos parisinos del siglo XIV, y que en los
barrios colocas los cubitos. Si, tal y como. Ya en la presentación
del juego te dicen lo de colocar los cubitos. Vamos, temático como
ningún otro.
Pero
chicos, que es lo que tiene este Feld. Se trata de que cada uno, en
su barrio, vaya colocando habitantes en los distintos edificios por
medio de cartas, y así poder ir cogiendo lo que da cada edificio, y
siempre sin perder de vista la plaga de ratas, que a este hombre lo
de meter condiciones de agobio le pone palote.
Las
cartas que juegas se eligen al azar de tres en tres, y con esas tres
se hace un draft. Después de cada ronda tienes la opción de
contratar a uno de los personajes comunes, y empieza otra ronda.
El
juego se repite en tres partes A-B-C de tres rondas cada uno, y como
buen juego de mayorías, el que tenga la mayoría de puntos al final,
gana.
Precio/Componentes:
Por unos 27 euros tienes
este jueguecillo.
Visto
así, sin más, pues se hace de precio bueno. Claro, es lo que tiene
que cuanta más crisis tenemos, más suban las cosas, que ves un
juego de menos de 30 pavos y piensas que están liquidando la tienda.
Pues no, es un juego bueno, y no caro. Pero claro, sin hablar de
componentes.
Pero
como este apartado es sobre precio/componentes, el juego es otro robo
más. No lleva más que unos pocos cubitos, en este caso cubititos, y
el resto es cartón malo y fino, y cartas endebles, que debes
enfundar porque encima llevan sobe y barajeo en la partida. Para que
os hagáis una idea, es similar en calidades al Borgoña, lo que
demuestra que hay editoriales que tienen claro que su fama vende, y
que el que quiera buenos componentes compre juegos de editoriales
emergentes.
Vamos,
que el juego podía costar 20 euros y ganarían dinero, pero incluye
7 euros de aire fino, fino.
Componentes: Poco
más que decir que no haya dicho ya.
Los
cubos son muy pequeños, pero al menos de madera. Las cartas tirando
a finas, por lo que al precio del juego le debes añadir el precio de
las fundas. El cartón de los tokens y los tableros es fino, pero
fino de verdad. Vamos, que no se dobla porque como son pequeños no
pesan.
El
insert no vale para mucho, porque son huecos genéricos, y la caja es
fina también.
Que
si, que tiene algo bueno: por un lado el tamaño de la caja es
estándar, con lo que lo apilas chupi; por otro el aire que incluye
es de calidad, de alto porcentaje de oxígeno, como el que hay en la
montaña; y por último las ilustraciones son muy boni.... ja, ja,
ja, ja!!! ¡Ay, perdón! He aguantado hasta donde he podido.
Número de jugadores:
Pues de dos a cinco según
indica la caja, y es verdad.
El
juego escala muy bien, porque como muchos juegos de Feld, es un
multisolitario. Ya comentaré algo sobre la interacción, pero os
adelanto que es poca. Y claro, si es un multisolitario, pues sólo
con tener espacio de juego, el número de jugadores afecta poco.
Si
me parece ingenioso como unen los barrios para distinto número de
jugadores, pero ya no hay más adaptación que esa, y aún así rula
bien. A mi me gusta jugarlo casi a cualquier número de jugadores, y
creo que las sensaciones son muy similares.
Reglamento: Pues
es sencillito de entender, y hay traducciones de todo tipo. Las hay
literales al original, y otras que quitan resúmenes.
Las
que son como la original incluyen la traducción de los resúmenes de
los márgenes, que te ayudan en las primeras partidas o cuando llevas
tiempo sin tocarlo. Y entre ejemplos y resúmenes la verdad es que el
juego queda meridiano.
También
es cierto que el juego no es muy complicado. La verdad es que es
sencillo: draft de cartas, juego dos de las tres según los iconos de
las cartas, contrato a un personaje si puedo, y así nueve veces.
Punto.
Interacción: Uno
de los puntos flojos, flojísimos del juego. No hay prácticamente
nada. Existe un draft inicial, que da un puntito de interacción.
Luego está la carta de las carretas, que te permite coger mensajes
de otros, que añade un puntito más. Y luego están los puntos de
Notre Dame, que se reparten entre los que hayan participado, que le
da un toquecito. Pero sumando todo, pues un 5 sobre 100, y eso siendo
generoso.
Es
de los juegos que gustan a los aficionados a montar su chiringuito,
sin mucho roce.
Mecánica: Pues
tiene una mecánica muy sólida, sin muchos achaques, y que encaja
perfectamente, pero a pesar de ello, tiene cositas que puede que no
te gusten.
Por
un lado tenemos el azar. Hay azar en las cartas en todas las fases:
de las tres que coges para empezar el draft son al azar, de las que
sacas de los personajes comunes son al azar, y las de los personajes
de cada era también. Luego hay también azar al recoger los mensajes
con la carreta, que hay algunos muy buenos en comparación con otros,
y que además se colocan boca abajo en cada barrio. A pesar de esto,
no creáis que es un juego con mucho azar, son detalles, y
principalmente por una razón, y que a la vez es otra de las pegas:
las cartas salen todas.
Si,
en cada era usas todas tus cartas, en cada era salen todos los
personajes comunes y de era, con lo que puedes controlar lo que ya ha
salido y lo que queda por salir. Eso resta importancia al azar, y
aumenta el control estratégico.
Pero
claro, tiene su parte mala, hace que al juego se vuelva aburrido ante
la poca variedad de cartas, y que se pueda quemar con relativa
facilidad. Sólo hace falta espaciar un poco las partidas.
Es
propenso a cometer ciertos errores de principiante, lo que hace que
la experiencia sea un grado, como no dejarte una moneda para usar la
carta de Notre Dame, o para contratar a un personaje.
Pero
lo peor, y a la vez lo mejor, es la plaga de ratas. Lo mejor porque
le añade un tensión al juego de las que me gustan, de las que te
pueden agobiar toda la partida, de las que no puedes olvidarte porque
son decisivas. Una de esas tensiones que tanto me gustan, pero que
hay tanta gente (gente sin criterio jueguil, se entiende :) )que
odia, que puede hacer que la experiencia de juego sea horrible. Y en
este punto, el factor azar si que es determinante, porque el ritmo en
que aumenta la plaga de ratas lo marcan los personajes que salen en
cada ronda, sacados al azar como recordaréis, y que hacen que haya
partidas agobiantes desde la ronda 2, y otras en que las ratas no son
ni una molestia. Esa diferencia en las sensaciones de partida,
dependiente totalmente del azar, hace que una primera partida pueda
ser apoteósica, o un cagarrio.
Por
lo demás, pues es un juego de adaptarte en cada ronda, que no te
permite apenas planificación a más de un turno vista, y donde la
adaptación a veces depende mucho de la suerte. Una carta que robas
en el momento en que te viene bien te puede dar muchos puntos, y esa
misma carta, dos rondas antes, no te sirve para nada. Si, parece que
me contradigo en lo de la importancia del azar, pero son las
sensaciones que te deja el juego: mientras juegas no parece que la
suerte intervenga mucho, pero al terminar la partida, y repasar las
rondas, ves que ha sido determinante en momentos puntuales.
¿Os
dais cuenta de a donde quiero llegar?. Pues eso. ¡¡Que probéis el
juego, coñe!!.
Duración: Pues
es de esos juegos para sesiones cortas, o para repetir.
La
caja dice que entre 45 y 75 minutos, y miente muy poco. En partidas a
dos, sabiendo jugar, te lo ventilas en 30 minutejos. Con cinco
jugadores es más fácil irse a los 80/90 minutos.
En
cuanto al AP, pues no es de casos extremos. Ten en cuenta que tiene
dos cosas buenas para que no te quedes pillado con la siguiente
jugada: por un lado te adaptas en cada turno a lo que tienes, con lo
que te quitas los monólogos mentales de calcular la puntuación
final durante la preparación del tablero, que casos hay. Por otro
lado, al influir tan poco lo que hagan los demás, puedes planificar
tu turno en cuanto has terminado la fase de draft.
Vamos,
que son todo ventajas el que sea un solitario.
Preparación y
transcurso: Pues lleva un
ratejo, pero no demasiado.
Tienes
que montar el tablero, dar a cada jugador sus cartas, sus cubos y sus
mensajes, barajar las cartas de personajes, y estás listo.
En
comparación, y puesto que cuesta montarlo para dos lo mismo que para
cinco, pues es de preparación corta para cinco y media para dos. Es
lo que tiene la relatividad.
El
espacio en mesa es bastante comedido, permitiendo jugarse en
cualquier mesita de café, y si no fuera por la cantidad de
cartoncitos en la mesa, hasta mesita de bar
Curva de aprendizaje:
No tiene mucha. Es un juego
sencillo de entender en cuanto a reglas, y salvo algún error que
aprendes a no cometerlo tras la primera partida, no existe mucha
diferencia entre novatos y pros.
No
es un juego de combos, de sutilezas y demás. Con controlar un poco
el nivel de ratas y no quedarte sin pasta, puedes hacer una partida
bastante decente.
Expansiones: Pues
hay una expansión de nueve cartas que se publicaron en el Alea
Chest, que era como un compendio de mini expansiones para sus juegos,
pero que sinceramente, ni he visto ni se de qué van. Sorry.
Bueno, y una expansión no oficial que mete componentes para jugar hasta 7 jugadores. El que se la ha currado debe pensar que no hay juegos mejores para jugar en dos horas, aunque sea dividiendo el grupo, digo yo.
Idioma:
El juego no está publicado en castellano, pero no tiene dependencia
alguna del idioma.
Todas
las cartas funcionan con símbolos, algunos más obvios, otros nada
obvios, pero no preocuparse. Existe por la red tanto traducciones de
las reglas, que ya incluyen explicaciones de las cartas, como
tarjetones de ayuda con todas las cartas explicadas. Imprimes en A5,
plastificas, y dignificas un poco los componentes de este juego
Pues chicos y chicas, se
terminó.
Son de esos juegos que me
gustan mucho, pero mucho, y que encima no se me dan mal, pero está
claro que necesita una revisión de la edición, aunque ello suponga
subirle un poco el precio.
Este juego, con mejores
acabados y una revisión estética ganaría enteros, así que a
esperar, que como últimamente se reedita hasta lo que no debió
editarse en su día, seguro que con paciencia todo llega.
Nos leemos, zanguangos.
Preciosa y encantadora reseña.
ResponderEliminarYo fue uno de los primeros Feld que probé, y la verdad es que me gustó muchísimo desde la primera partida. Todo lo que dices es cierto (y tanto) pero aún así no puedo evitar sentir atracción por este juego, y a ver si un día puedo hacerme con uno para la colección.
Entre los componentes, me encanta lo que te mete en el tema la ficha de jugador inicial, haciendote creer que durante una ronda eres el campanero de Notre Dame. Luego dirás que no hay tema.
Gracias por venir.
EliminarLuego yo me catalogo de facilón para convencerme de lo que sea, pero es que te dan un cartón con un jorobado y ya te ves saltando por las torres de la catedral.
Niños, no le hagáis caso, el juego no tiene tema ninguno. Pues eso. Ahora un pis y a la cama
Y yo sin probar un Feld!
ResponderEliminarEste es de los que menos me llama, pero con la tralla que le metes a los juegos en tus reseñas, con este no has mordido mucho. Se vé que te gusta!!
Herejeeeeeeee!!!!
EliminarNo has probado un Feld y tus amigos te hablan? Imperdonable.
Este creador me encanta, y aunque es verdad que no tiene tema normalmente, es que hace euros, y los clava el jodío. Y encima suelen tener su puntito de tensión. Vamos, que no esperes más, y salvo el Roma que no se parece a los típicos, cualquiera es buena elección.
Ah, y gracias por comentar
Esta claro que mi próximo pedido seran uno o dos Felds. Es que ya me pica la curiosidad.
EliminarEl Castillos de Borgoña caerá fijo... Si pillo dos, igual el Bora Bora o el Año del Dragón...
Me encanta!
ResponderEliminarEstá un puntito por debajo de otros Feld, pero tiene a su favor que es sencillo, agobiante, rápido y que escala de maravilla. Otros Feld fallan un poquito en eso último.
Una cosa importante: los mensajes de las carretas se colocan boca abajo, al azar, pero antes de empezar la partida se ponen boca arriba... ejem xD
Y es verdad que tiene ese puntillo de azar, aunque no creo que sea determinante.
Sobre las ratas, ah, benditas ratas :D
Gracias por pasarte, y por la aclaración de los mensajes.
EliminarPues eso, que le quitamos un mini punto de azar.
Yo lo veo muy parejo en calidad con la mayoría de sus juegos, y es que encima la duración es perfecta: dura lo que algunos filler o juegos chorras pero es un euro con patas y todo.
Gran análisis, aunque esta vez no estoy de acuerdo en algunas cosas contigo. Para empezar y al igual que Lethan, no considero que el azar sea determinante en el juego y más cuando las cartas de personaje no son muchas y a la tercera partidas ya te haces una idea de lo que puede salir o no para planificar mejor el turno, después de todos son siempre las mismas cartas. En cuanto a la interacción, creo que el draft le proporciona mucha, sobre todo en partidas a tres jugadores, en las que puedes influir y mucho en la estrategia que llevan los otros, no pasándole las cartas que necesitan y demás. Y con respecto a lo de que no hay combos, pues bueno lo que hay son varias estrategias que si la gente no te bloquea son victoria segura y no me preguntes cuales, porque hace un montón que no juego y no me acuerdo bien, pero había una con las monedas que era la caña. Un saludo.
ResponderEliminarGracias por escribir.
EliminarY nos vas a dejar a todos con la miel en los labios de la estrategia demoledora?? que mala genteeeeeeeeeeeeee.
Si lo mejor es que no coincidamos, porque así el que lea ve varios puntos de vista.
En lo del azar, según las partidas, yo creo que puede llegar a determinar esa pequeña diferencia que te de la victoria: me queda una moneda, y al robar cojo la carta de notre dame, paso y me viene otra carta de notre dame y la tercera no me permite pillar dinero. En esta ronda hay un montón de ratas y el personaje que hace que la plaga sea 0 si le sobornas. Pues no hay pasta para todo, y robadas las cartas en otro momento, o con otros personajes, pues puede cambiar la partida. Que si, que culpa mia por tener una sola moneda, pero ya sabéis lo que quiero decir.
Y si te digo que la semana pasada entró Notre Damme en mi ludoteca xD....era uno de esos Feld que probé hace año y medio y lo tenía en mi lista y finalmente ha caído.
ResponderEliminarEstoy deseando estrenarlo, recuerdo esa tensión que dices de las ratas, muy guapo y el juego que le daba las carretas.
Un saludo y buena entrada ;)
Gracias por comentar.
EliminarPues si me dices que acaba de entrar en tu ludoteca... demuestra que eres un tio con gusto, elegante, con clase y estilo, informal pero resultón. Vamos, que te has dado cuenta de tu error, y a pesar del tiempo, lo corriges y lo admites. Un puto crack. ;)
Ahora a jugarlo mucho y hacer una entrada de mega análisis que nos haces.
Yo lo probé con Lethan (su copia) hace ya muchos años, y no me acuerdo muy bien de la partía. Sí recuerdo que apenas la disfruté, pues era de madrugada y estaba muerto de sueño, y que el juego tenía miga.
ResponderEliminarMe encantaría rejugarlo hoy en día.
Gran análisis figura ;)
Gracias por acompañarnos.
EliminarEs de los juegos que reuieren la mente despierta, desde luego.
Además, tiene esa estética de juego antiguo que seguro que te mola. Parece un juego underground visualmente, la verdad.
Si la próxima que nos veamos no lo has rejugado, nos montamos una, que el pasado Córdoba fue de lo primero que jugué el sábado... ¿o fue el domingo? La edad no perdona
Pues me atraia este juego de feld por su temática y me llevado un chapapote xDD. Bueno no quita que pueda probarlo en una macroquedadas de las nuestras no?
ResponderEliminarPor cierto reseñaza, te lo has currado bien.
Un cordial saludo ;)
Gracias por comentar.
EliminarDecir en una misma frase que un un juego de Feld te atrae por su temática creo que está muy penado.
Que te gusten sus mecánicas, pues sí, pero jamás hay que comprarse un juego de este hombre por la temática.... porque da igual la que sea.
Buen análisis.
ResponderEliminarPara mí es el típico Feld. Como tú has dicho: mecánicas perfectas, interacción casi nula, tema inexistente y en lo que no estoy de acuerdo es en el agobio.
Si una cosa tiene Feld es que suele angustiarte en sus juegos, pero en Notre Dame las ratas no son lo suficientemente duras (creo yo). Se controlan más o menos fácilmente.
Un juego que no me gusta.
Lo vendí hace tiempo. :)
Saludos!
Gracias por venir.
EliminarSi que es verdad que la sensación de agobio ni se asemeja a la del Año del Dragón, pero en este juego lo de las ratas depende mucho de la suerte.
En mis partidas las ratas no suelen ser un problema, porque como bien dices, se controla fácilmente, pero alguna sale que realmente te agobia
Magnífica entrada, como siempre, aunque esta vez creo que a mi el juego me entusiasma bastante más que a ti. Yo también pienso que hay más interacción de la que comentas, pero bueno. Y la estética, a mi me gusta. Pero a lo que iba, la expansión. Se trata de nueve cartas de personaje (los de ABC), que se pueden mezclar con los del juego básico. Tomas los 6 de A, barajas, y pillas 3. Y con B y C igual. Así hay bastante variedad en cuanto a los personajes que van a salir en juego. Por supuesto, antes de empezar la partida, se hace público qué personajes habrá, pero no el orden. Yo lo he jugado muy poco, pero entiendo que alguien con cierto nivel puede aprovecharse bien de saber qué personajes van a salir.
ResponderEliminarEn mi opinión, una magnífica expansión, porque es poquito, no cambia en nada el juego en sí, y añade variedad. Lo que yo entiendo que debe ser una expansión. Lo malo, que comprarla suelta no es trivial. Yo pude encontrarla en BGG de chiripa, un tipo que la vendía suelta (y la del Año del Dragón).
Junto al Año del Dragón, mi favorito de feld. Creo.
Javi36
Gracias por escribir.
EliminarY muchas gracias por explicarnos lo de la expansión. Al ver que eran cartas sin más, supuse que sería algo por el estilo, aunque la verdad es que pensaba que iría más por los personajes comunes, que alrepetirse en cada era como que se hacen más cansinos.
En lo que discrepas, pues me alegro, que en la variedad está el gusto. Siempre lo digo, y lo repito, que lo que comento son cosas que no me gustan a mi o que puede que a alguien no le gusten, sin más.